Estimadas y Estimados Trabajadores de BancoEstado

Les saludo en nombre de la Directiva Nacional del Sindicato.

En esta ocasión, para compartir con ustedes un par de reflexiones sobre el momento social, político y económico que vivimos.

Estamos pasando por un período de incertidumbre, donde las dudas son mayores que las certezas.

En política, cada día cambia el escenario y la agenda se mueve sobre la base de mucho temperamento y falta de mirada de largo plazo. Los oportunismos están a la orden del día y cada uno está intentando sacar ventajas del contexto, de los errores del otro o de cualquier situación que refuerce sus posiciones.

En economía, la situación tampoco es tan auspiciosa: por un lado, vemos que el mundo se comienza a recuperar de la crisis del COVID-19, pero la pandemia ha generado otras problemáticas como endeudamiento, aumento de inflación, falta de insumos, dificultades en el transporte global de mercancías, entre otros aspectos.

Por otro lado, en ámbitos sociales, enfrentamos una nueva etapa de incertidumbre laboral; dificultades en el acceso a seguridad social y un claro aumento de la brecha entre quienes tienen más posesiones y quienes no.

En educación, por ejemplo, vemos que durante el confinamiento se amplió la brecha de calidad, producto de las diferencias en acceso a Internet, acceso a tecnología y condiciones generales de conectividad e infraestructura.

Y en salud, se evidenció un aumento de enfermedades psicosociales junto a la postergación en el tratamiento de miles de operaciones y procedimientos quirúrgicos.

Podríamos seguir, porque la lista es larga, pero en el fondo lo que tenemos que entender es que vivimos en una realidad dual: por un lado, fuertemente influenciados por grandes presiones globales; por el otro, estamos siempre anclados a la acción más palpable y concreta; esa que está al alcance de la mano…lo que llamamos “el día a día”.

Tenemos globalización por un lado y proximidad por el otro.

En ese espacio intermedio, discurre toda una serie de intercambios, tensiones que necesitamos enfrentar y que estamos convencidos, la única gran receta para enfrentarlas es fortalecer la COMUNIDAD…
En nuestro caso: LA COMUNIDAD BANCOESTADO.

Ninguno de nosotros puede enfrentar los desafíos de manera individual. Tenemos que actuar en conjunto, con unidad, con solidaridad y sobretodo…con empatía.
Y los sindicatos y trabajadores organizados sabemos de ello.

Durante todo el siglo XX, fueron los trabajadores organizados los que permitieron avanzar en el acceso a derechos universales: desde el descanso dominical y la jornada de trabajo; pasando por la seguridad social, el derecho a huelga y a la sindicalización, entre otros.

La organización es el antídoto al individualismo. Por eso en estos tiempos de dudas, es donde tenemos que poner más esfuerzo en construir con mirada amplia.
Con una perspectiva aglutinadora; de sumar más que restar.
Mirando el bosque, los árboles…pero incluso más allá.

Esa mirada no es el fruto de un iluminado o de unos pocos, sino el resultado de la construcción de una visión colectiva de la que todas y todos somos responsables…

Tenemos que participar activamente de las acciones internas; de las reuniones, de los eventos, de las campañas solidarias y, por cierto, de los procesos democráticos.

Como saben, pronto tenemos Elecciones Sindicales y el reto para todos nosotros será demostrar ahí, que este cuerpo social sigue vivo, sigue creciendo y “hace carne” la idea de que SINDICATO SOMOS TODOS.

Como Directiva les invitamos a seguir en este viaje juntos. En este barco donde todas y todos son bienvenidos para aportar al fortalecimiento de las relaciones laborales, a la protección del empleo; al crecimiento en oportunidades, al respeto para cada persona; al reforzamiento de la dignidad y calidad de vida de todas y todos los trabajadores del Banco.

En esta oportunidad, quizá la última en que me dirija a ustedes por este medio, ojalá el vital tranquilo de mi voz pueda llegar a gran parte de los trabajadores del Banco…en las sucursales, en las Áreas Centrales y también a los que “están dándole” al trabajo desde sus hogares, para decirles que hay que participar en las próximas elecciones.

Con responsabilidad y con mucho optimismo.

Evaluando lo que hemos aportado cada uno de nosotros y, también, mirando el potencial de algún nuevo aspirante. Pero siempre, con una perspectiva de futuro; pensando en lo mejor para los trabajadores, el Sindicato y el Banco.

A nombre de la Directiva Nacional…Un fuerte abrazo para todas y todos.

Vivan los trabajadores del Banco !
Vivan los trabajadores de Chile !