Ejemplo de vocación de servicio, Elga Benítez, ha desarrollado, en estas cuatro décadas, un fuerte vínculo con los trabajadores a través de su participación como directora de la Codebech Nacional, delegada sindical y actualmente, como integrante de la Directiva Nacional del Sindicato.
A inicios de la década de los ochenta, en plena crisis económica, Elga Benítez ingresó a BancoEstado. Eran tiempos difíciles, pero comenzaba su carrera profesional; si bien, eran sus primeros pasos en el mundo laboral, serían pasos muy importantes para el resto de su vida.
Era una época de modernización, los sistemas computacionales daban un nuevo giro a la actividad económica, pero sobre todo, a la actividad financiera, por lo cual, era un campo fértil para que ella desarrollará sus conocimientos informáticos y fuese protagonista de la modernización de BancoEstado.
“Fui una privilegiada al poder participar en la modernización de la empresa. Fui testigo de la transformación del Banco y puedo decir con orgullo, que entregue todos mis conocimientos a ese tremendo desafío que, gracias al esfuerzo de muchos trabajadores, llegó a buen puerto”.
Delegada sindical por muchos años de la Gerencia de Sistemas, reconoce que siempre ha trabajado –en diversos espacios sociales- por el bienestar de las personas. Comenzó en el área del deporte, como parte de la directiva de la Codebech entre el año 2006 y 2012. Además de destacarse como una gran tenimesista.
Sin embargo, motivada por sus colegas, aceptó el desafío de participar como candidata, en las elecciones del Sindicato.
“La gente de mi gerencia quería un representante en la Directiva Nacional y pensaron en mí, fue una tremenda responsabilidad, pero enfrenté el desafío con entusiasmo, asumiendo esta vocación de luchar por los demás, siempre teniendo como espejo a mi padre, que fue un destacado dirigente sindical del diario El Mercurio”.
De familia muy unida, tres hermanos y con el recuerdo vivo de sus padres que ya no están, Elga disfruta de sus 5 hijos y 11 nietos. Amante de los viajes, con su familia ha recorrido distintos lugares del norte y sur de Chile, pero confiesa que aún le queda mucho por recorrer.