Antes que todo, queremos informar que, frente a los hechos ocurridos ayer, 6 de febrero, en la sucursal Putaendo, nuestro Sindicato Nacional está acompañando las medidas de protección adoptadas por la Administración en favor de los trabajadores afectados. En este sentido, ya se han implementado acciones de contención física y apoyo psicológico para acompañar a los(as) colegas en esta difícil situación.
Al mismo tiempo, considerando los hechos de violencia sucedidos de los últimos días en distintas sucursales del país, el Sindicato Nacional ha solicitado una reunión con el Ministerio del Interior para exigir mayor resguardo en las oficinas del banco y reforzar la urgencia de una regulación efectiva que proteja a los(as) trabajadores(as) ante agresiones.
Hemos trabajado -por largo tiempo- en la búsqueda de acciones de protección, prevención y resguardo para los(as) trabajadores(as) mediante una legislación más estricta, que establezca sanciones penales contra los agresores. Esperamos que, tras lo ocurrido, la autoridad tome conciencia de que esto debe ser una prioridad país.
Exigimos una respuesta efectiva ahora. El Estado no puede esperar a tener víctimas fatales para actuar.
