Son muchas las muestras de solidaridad que han suscitado los incendios en la Región de Valparaíso. El nivel de la catástrofe no ha dejado indiferente a nadie y menos, a los trabajadores de BancoEstado, quienes -una vez más- han estado a la altura de las circunstancias, respondiendo a la necesidad de ayuda de miles de personas que lo perdieron todo.
En ese contexto, los trabajadores que forman parte de los Cuerpos de Delegados de la Oficina Principal y de Santiago Centro, desarrollaron una campaña de recolección de alimentos, ropa, útiles de aseo, entre otros productos. Dicha cruzada solidaria concluyó el pasado lunes cuando los trabajadores, acompañados por nuestro secretario general, Marco Beas, trasladaron toda la ayuda hasta la Quinta Región.
Sin dudas, todo un ejemplo de compromiso con la comunidad frente a este drama que conmueve al país.
Pero no han sido los únicos, otra muestra de solidaridad la dieron los trabajadores y las trabajadoras deportistas de la Codebech Nacional, quienes cerraron su campaña, trasladando toda lo recolectado hasta Villa Independencia, de la ciudad de Viña del Mar, con ayuda para 56 familias afectadas por los incendios.
Las familias recibieron dos kits de emergencia, el primero de ellos, con artículos de aseo personal, compuesto por: pack de toallas higiénicas, pack de cepillo de dientes, jabón en barra, jabón líquido, shampoo, acondicionador, confort, toallas húmedas, toallas desinfectantes, rasuradora, desodorante mascarillas y pasta de dientes. El segundo, en tanto, fue elaborado con alimentos para niños, leche en caja, galletas y barras de cereal.
Además, entregaron 100 desayunos a los vecinos de Villa Independencia, alimentos que se sumaron a los numerosos bidones de aguas que donó la Codebech, que fueron repartidos en dos centros de acopios locales y a la variada mercadería que donaron los trabajadores y que fue entregada a diferentes ollas comunes.
Finalmente, el éxito de la cruzada se logró gracias a las donaciones de los propios deportistas, al apoyo de nuestro Sindicato Nacional, que financió los costos asociados a tres vehículos que trasladaron las ayuda hasta la Región de Valparaíso; al querido Aguirre Marín, que aportó una cantidad importante de artículos para el aseo personal de los damnificados, y a la Gerencia de Gestión de Personas y Desarrollo Organizacional, que donó pañales para niños.