Durante la reunión, el Sindicato Nacional expuso su molestia con el proceso de despidos o amonestaciones que significó, para un grupo de trabajadores, el haber solicitado el Bono de Clase Media, más cuando BancoEstado fue la única institución pública donde se establecieron sanciones.
Los dirigentes cuestionaron la idea de “falta ética” con que se responsabilizó a los funcionarios, considerando, sobre todo, la responsabilidad del Servicio de Impuestos Internos al desarrollar un sistema de postulación confuso y plagado de errores.
Por otro lado, si bien la Organización reconoció el trabajo desarrollado -durante la pandemia- con la Gerencia de Relaciones Laborales, exigió a la Administración mejorar la comunicación con sus mandos medios, para hacer más eficiente las medidas respecto al cuidado de los equipos de trabajo, dado que –a juicio del Sindicato- las jefaturas intermedias distorsionan, de manera permanente, la información acerca de permisos, horarios de salida, ajuste de metas comerciales y otros temas vinculados al devenir de las áreas y la red de sucursales durante la crisis sanitaria.
El Sindicato reiteró la necesidad de evitar las presiones hacia los trabajadores para que logren un determinado rendimiento comercial. Junto a lo anterior, manifestó que es fundamental mejorar la capacidad de liderazgo de las jefaturas y evitar sensaciones como las que provocó el comunicado, enviado a los trabajadores, donde se les instruía a responder de una determinada manera ante una situación de control por parte de la fuerza pública.
El Sindicato además, solicitó, en lo específico, revisar la exigencia respecto a la medición de transaccionalidad de cajas, entendiendo el contexto de la pandemia y cómo eso repercute en el rendimiento comercial de las sucursales. Los dirigentes solicitaron revisar la permanencia de dicho ponderador en el Tablero Banco, dado que su porcentaje influye en el Sistema de Incentivos y no depende directamente de los trabajadores.
En tanto, también hubo espacio para plantear la incertidumbre que viven los trabajadores de la GDOT, donde existen permanentes despidos sin justificación clara, amenazas reiteradas y proyectos que, con insuficiente análisis, son puestos en marcha. A lo anterior, se suma un proceso de apelaciones con muchas irregularidades.
Finalmente, el Sindicato Nacional destacó, como siempre, el compromiso de los trabajadores y de la propia Organización con el desarrollo del Banco, en medio de esta crisis, pero advirtió que es primordial mejorar las comunicaciones, entregando directrices claras que, ante todo, eviten confusiones y protejan la salud de los trabajadores y sus familias.